La Cátedra Moragues se sustenta con una ideología de laboratorio experimental sobre 4 ejes: investigación, reflexion, experimentación y verificación. Tiene como objetivo comprender la actualidad como resultado inequívoco de la historia y la evolución del mundo y del ser humano. Introduciendo en este marco, el concepto de tendencia como fenómeno de definición global y totalizadora de una sociedad en constante cambio.

jueves, 3 de abril de 2014

Victoria Lescano la periodista y ensayista especializada en moda



La literatura en la pasarela

En su nuevo libro, Letras hilvanadas, la periodista y ensayista especializada en moda Victoria Lescano rastrea la presencia y la importancia de la vestimenta y de los accesorios en algunos escritores argentinos de los siglos 19 y 20.

Por Gustavo Pablos
0

Pieles, claritos, dijes, botones, charreteras, galeras, guantes, monóculos y capas, entre muchas otras, son algunas de las palabras que integran el extenso y variado vocabulario sobre prendas, texturas, accesorios y estilos que se encuentra en Letras hilvanadas. Cómo se visten los personajes de la literatura argentina (Mardulce), un curioso volumen que revela el espacio que escritores y publicaciones culturales le han dado a la vestimenta.
Victoria Lescano describe y analiza el modo en que la vestimenta y la moda están presentes en algunas ficciones de la literatura argentina: en Roberto Arlt, Manuel Puig, César Aira, Silvina Bullrich, Hebe Uhart, Silvina Bullrich, Lucio V. Mansilla, Victoria y Silvina Ocampo. Pero también en los autores de mediados del siglo 19 que aportan el tono vintage: Juan Bautista Alberdi y La Moda, publicación pionera sobre los “estilos porteños”; en los cuentos y las crónicas de Fray Mocho y en la novela La gran aldea, de Lucio V. López. Así como en las columnas de moda de la escritora Sara Gallardo, en las memorias del modisto Paco Jamandreu y en las opiniones de Adolfo Bioy Casares.
La moda en los pliegues
Letras hilvanadas continúa una serie iniciada con Prêt-à-Rocker, un volumen sobre la vestimenta en el rock argentino, pero a diferencia del anterior ahora la fuente no son las entrevistas sino las obras literarias, que la autora se dedicó a “hilvanar” con los mismos recursos de sus crónicas. “El proyecto surgió de apuntes sobre literatura que tomé durante un tiempo y de la investigación que había hecho años atrás sobre la revista La Moda, de Alberdi. Se terminó de definir cuando en 2012 fui a algunas clases de un taller con la escritora Hebe Uhart, de ella me encanta el tono con que describe la vestimenta, con sus descripciones muy meticulosas y preciosistas”, comenta Lescano.
–¿Cuál fue el criterio para la elección de autores y obras? 
–El recorte es personal y deliberadamente no cronológico, que ya se ha convertido en mi metodología de trabajo. A La costurera y el viento, de César Aira, me lo regalaron hace muchos años y se volvió favorito dentro de mi biblioteca. Después sumé Ema la cautiva y El vestido rosa. De Paco Jamandreu conservo un ejemplar de sus memorias, La cabeza contra el suelo, que él mismo me regaló: un libro de culto entre mis amigos y que casi no se consigue, y por eso puse muchas citas textuales. Y también fue un hallazgo descubrir a Sara Gallardo como columnista de moda, y quise reivindicar sus crónicas y sus arbitrariedades.
Quise que el libro estuviese a salvo del ritmo vertiginoso de los modos de comunicar moda y de las estrategias del periodismo
  •  
  •  
–¿Qué intentan decir estos autores a través de la vestimenta y de la moda? 
–Fray Mocho fue el pionero en ironizar sobre el interés de los argentinos por emular a los franceses. Mientras que en Una excursión a los indios ranqueles y en las causeries, de Mansilla, que leo desde hace años, me llama la atención la elegancia extrema en las tolderías y cómo las reacciones y las negociaciones se valen de la vestimenta y los accesorios, como la capa y los guantes. De Arlt me llamó la atención la forma en que narró con extremada gracia el tono gris de los ropajes en las pensiones, en contraste con la exaltación del fetichismo en las medias de mujer. En el caso de Puig me interesó su forma de ilustrar las costumbres de pueblo, el tono casero y casi rudimentario, como la lavandera Rabadilla y sus odas a la lavandina, y la idea de vestir a sus personajes rigiéndose por los estilos de las estrellas de Hollywood. Creo que fue un pionero y que se anticipó varias décadas al actual fanatismo por las red carpets (alfombras rojas).
El capítulo sobre Bioy Casares es una nueva versión de una entrevista que Lescano le realizara a fines de la década de 1990, en la que el dandy por excelencia de la literatura argentina da un glosario personal sobre la moda. “Además de predicar el dandismo desde su ropa y desde el uso del perfume de Guerlain, fue fan de las flappers y más precisamente de Louise Brooks, un referente de la moda”, señala Lescano.
–¿Cómo fue la relación de las hermanas Ocampo con la moda?
–Mi mirada sobre una posible casa de modas contada por las hermanas Ocampo marca ciertas diferencias en los gustos personales. Victoria adoró vestirse con Chanel, mientras que a Silvina, según me dijo Bioy, la moda no le interesaba demasiado. En su cuento “El vestido de terciopelo” reflejó la costumbre de las modistas a domicilio, y en “Las vestiduras peligrosas” exaltó los bocetos previos a vestidos cosidos de modo compulsivo. En sus textos los ropajes adquieren más bien un carácter “fantástico”.
–¿Por qué no hay autores y obras de las últimas décadas, a excepción de Aira y Uhart?
–En el proceso de escritura consideré tomar algunos casos del siglo 21, pero los indicadores más recientes no resultaban para este ejercicio. Hice algunas consultas y llegué a preguntar entre algunos expertos cuál es la gran novela de moda de la literatura argentina y no tuve respuestas contundentes, sólo algunas pistas sueltas pero que forzaban la trama. El peletero, de Luis Gusmán, y La historia del pelo, de Alan Pauls, pudieron haber estado pero las descarté. Si bien yo cubro noticias de moda y pasarela, que forman parte de lo efímero, quise que el libro estuviese a salvo del ritmo vertiginoso de los modos de comunicar moda y de las estrategias del periodismo.
Perfil
Victoria Lescano nació en 1968 en Buenos Aires. Ensayista y periodista especializada en moda, publicó Followers of fashion. Falso diccionario de la moda –con ilustraciones del diseñador Pablo Ramírez– y Prêt à Rocker. Moda y Rock en la Argentina. Es columnista de moda en Las 12, suplemento de Página/12.

No hay comentarios:

Publicar un comentario